La
causa de la muerte fue una hipoxia cerebral por falta de nutrientes.
Tomado
de EL COMERCIO (ECUADOR) / GDA |
9:32 a.m. | 11 de mayo de 2015
En su estómago fueron encontrados grandes grumos de
chicle.
Samantha Jenkis, de 19 años, amaba mascar chicle,
pero su adicción por la golosina terminó con su vida en 2011, según determinó
recientemente un médico británico.
La causa de la muerte de Jenkis fue una hipoxia
cerebral, que se produce cuando no llegan nutrientes ni oxígeno al cerebro a
través de la sangre. Esto puede provocar convulsiones o incluso la muerte
cerebral, según detalla el diario británico Daily Mirror.
Sin embargo, el doctor Paul Griffiths, experto
patólogo del hospital Morriston (en Gales), realizó una autopsia para indagar
qué había detrás de este caso que llamó su atención. Él sospechaba que el
fallecimiento podía estar relacionado con los edulcorantes de los chicles sin
azúcar a los que Jenkis era adicta.
La joven consumía hasta 14 chicles cada día y sus
preferidos eran los que no contenían azúcar. Griffiths estudió la composición
de una de estas golosinas y encontró entre sus ingredientes sorbitol y
aspartame.
El “alto consumo” de estos dos elementos habría
intervenido en la reducción de sales en el cuerpo de la joven. Además, el
experto relató que al momento de practicar la autopsia se encontró en el
estómago de Jenkis algo que no había visto antes: cinco “grandes grumos” de
chicle verde.
María, madre de la adolescente, dijo que creyeron
que la causa de la muerte de Samantha fue natural, algo que con esta
investigación pierde sustento. "Ella se había quejado ese día de que se sentía
mal y me dijo que tenía dolor de cabeza, como agujas y alfileres. Se fue a la
planta alta a la noche y me gritó: '¿Es así como se siente morir? Estoy
paralizada", dijo al diario.
En un estudio reciente, que fue realizado por la
agencia de control alimenticio británica Food Standards, se demostró que el
aspartame no causa ningún daño para la salud, sin embargo la controversia que
por décadas han desatado los sustitutos del azúcar continúa.